Rafael Nadal se ausentará de Roland Garros por primera vez desde que debutó en el Grand Slam francés en 2005. La lesión en el psoas ilíaco de la pierna izquierda que sufrió en Australia y de la que aún no se pudo recuperar completamente lo obligó a tomar la decisión de bajarse del torneo más importante de su carrera, en el que conquistó un récord de 14 títulos, y de alejarse del tenis durante algunos meses, para intentar volver competitivo en 2024.
Ese parate, por ahora indeterminado, le costará mucho al mallorquín, si de ranking se habla. Por no jugar en París saldrá del top 100 después de más de dos décadas. Y si no compite más en esta temporada, terminará el año casi sin puntos y fuera de los 600 mejores.
Rafa disputó en este 2023 apenas dos torneos. Perdió los dos partidos que jugó en la United Cup con el equipo español y se despidió en la segunda ronda del “grande” oceánico, en el que se lesionó. Ya no volvió a las canchas. Comenzó el año como número dos del mundo con 6.020 puntos y el próximo lunes, cuando se actualice la clasificación, aparecerá 15° con 2.445. La gran caída, igual, se producirá después de París.
En la capital francesa, el español tenía que defender 2.000 puntos, que consiguió a coronarse en la pasada edición con una victoria sobre el noruego Casper Ruud. Así, tras ese certamen, quedará con apenas 445 unidades y se ubicará en torneo al puesto 135°. Y por primera vez en más de 20 años no estará entre los mejores 100.
La última vez que Nadal apareció fuera de ese grupo fue a mediados de abril de 2003. En la semana de 14 al 20 de ese mes, como el 109° del ranking, superó la qualy de Montecarlo y se metió en el main draw, el primero de su carrera en un Masters 1000. Llegó a los octavos de final y perdió con Guillermo Coria. Y con los 90 puntos que cosechó sobre el polvo de ladrillo monegasco, apareció el lunes 21 en el 96° lugar, rompiendo por primera vez la barrera del top 100. Nunca más salió de ese lote.
El descenso del mallorquín, ganador de 22 “grandes” (comparte el récord de más títulos junto a Novak Djokovic), continuará luego de ese certamen si, como anticipó este jueves, no compite más esta temporada.
Es que en la segunda mitad del año, perderá otros 400 puntos: 10 del Masters 1000 de Cincinnati y otros tanto del de París (cayó en los dos en el debut), 180 del US Open (octavos de final) y 200 de las ATP Finals de Turín (ganó apenas un partido en el round robin). Quedará con 45 y cerrará el año alrededor de la 630° posición.
Hay que retroceder en el tiempo más de 21 años para encontrarlo tan abajo en el ranking: el domingo 29 de abril de 2002 figuraba 762°. Al día siguiente, gracias a las 15 unidades que había conseguido la semana previa en su primer torneo ATP, en Mallorca, al que entró gracias a una wild card y ganó un partido, trepó al 588°.
En tanto, si extiende su período fuera de las canchas y no compite en Australia 2024, perderá también esos 45 y quedará en cero, por primera vez desde septiembre de 2001.
Bendito ranking protegido
El objetivo de Nadal hoy es recuperarse completamente de la lesión y regresar a la competencia. Si así lo hace, el año que viene tendrá que aprovechar algunas wild cards (invitaciones especiales) o hacer uso del ranking protegido para ingresar a los cuadros de los torneos.
¿Qué es el ranking protegido? Es un recurso que tienen los jugadores que estuvieron al menos seis meses alejados de las canchas por lesión y que quieren volver a competir. Se calcula haciendo un promedio de las posiciones que ocupó el tenista en los primeros tres meses de inactividad y se puede utilizar para entrar al cuadro principal o a la qualy de un certamen. Es válido en los primeros nueve torneos en los que compita el jugador o por un período de nueve meses desde el primer evento disputado bajo ese ranking, lo que ocurra primero.
Según ese criterio, Nadal volvería como el 9 del ranking, lo que daría acceso al main draw de cualquier torneo que quiera disputar, desde los ATP 250 hasta los Grand Slams.