El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseveró que el Estado nacional “va a utilizar todas sus herramientas para impedir” que la ciudad de Buenos Aires o cualquiera de las provincias intente gravar con el impuesto a los Ingresos Brutos algún instrumento de política monetaria.
Así lo aseguro el jefe del Palacio de Hacienda al participar de la firma del Consenso Fiscal 2020, en un acto que encabezó el presidente Alberto Fernández junto a gobernadores, en la Casa de Gobierno.
“No hay que seguir con malos ejemplos. Gravar con Ingresos Brutos un instrumento de política monetaria le genera un problema a todo el resto del país, a todas las provincias y a la ciudad de Buenos Aires”, aseguró el ministro al explicar que eso “implica encarecer el costo del crédito y todas las empresas se perjudican en la posibilidad de generar trabajo e invertir”.
Para el ministro, apelar a ese recurso de financiación “no es una forma sensata de actuar, no es una forma responsable desde el punto de vista del federalismo y el Gobierno nacional va a utilizar todas sus herramientas para impedir que esto ocurra”, advirtió al pedir ir “en una dirección más armoniosa y federal”.
Las palabras del ministro hicieron implícita referencia a la intención del gobierno porteño que encabeza Horacio Rodríguez Larreta de gravar con Ingresos Brutos los intereses que cobran los bancos por las Letras de Liquidez (Leliq) y los Pases Pasivos que emite el Banco Central (BCRA).
La Ciudad pretende recaudar $12.000 millones por la imposición del 7% de IIBB sobre Leliq y Pases, además de otros $ 7.700 millones por aplicar a las tarjetas de crédito el Impuesto a los Sellos, como parte de un “ajuste transitorio” tras la reciente quita del 1,18% de coparticipación.
Al referirse al Consenso Fiscal 2020 firmado por la Nación y las provincias, el Guzmán resaltó que “ataca la cuestión de los endeudamientos irresponsables, de los problemas de la sostenibilidad de las deudas que tanto daño le han hecho a la Argentina y que de una vez para siempre hay que desterrar”.
“El Estado nacional y los gobiernos provinciales deben trabajar de forma coordinada”, expresó el funcionario y puso como ejemplo que la administración central “impulsó una reestructuracion profunda de los compromisos de deuda extranjera que se habían tomado bajo una expectativa que luego no se verificó”.
Argentina, continuó, “se endeudó fuertemente y no logró experimentar niveles de crecimiento para cumplir con esos compromisos, y era central sacarnos esa mochila para poder crecer, generar trabajo y un ambiente de estabilidad, más inversiones y oportunidades”.
En ese sentido, el ministro señaló que “hay provincias que se han endeudado en moneda extranjera y esto no es bueno para el federalismo, y es algo que hay que ir cambiando” al valorar que “el compromiso de las provincia de no aumentar la exposición en moneda extranjera y luego ir reduciéndola”.
“Hay una única caja de dólares que todos compartimos y no debemos desviarnos de ese proceso. En esa dirección la provincia de Buenos Aires ha mantenido una línea que es importante que las demás provincias sigan”, expresó Guzmán al explicar que el Consenso apuesta a mantener ese principio.
El ministro también se refirió, nuevamente, a la necesidad de enfrentar una adecuación tributaria de manera gradual sin comprometer la sustentabilidad de las finanzas públicas.
“Tenemos un compromiso de ir resolviendo los problemas de nuestra estructura tributaria que hoy es el resultado de múltiples emergencia es económicas”, explicó y señaló que eso hace que “las empresas enfrenten condiciones que no son las adecuadas para promover la inversión y la creación de trabajo”.
Al respecto, Guzmán definió que “es importante ir ordenando la estructura tributaria al tiempo de garantizar la sostenibilidad fiscal como activo para la estabilidad macroeconómica, y con una estructura mas progresiva, ordenadas y armoniosas de las relaciones fiscales entre la Nación, las provincias y los municipios”.