El Gobierno busca que los argentinos utilicen sus dólares del colchón, ahorrados por fuera del sistema formal. La sanción de la Ley de Inocencia Fiscal, que el Senado convirtió en ley el viernes, apunta en esa dirección. Si bien no está promulgada ni reglamentada, el ministro de Economía, Luis Caputo, instó a los bancos a que no pongan trabas a quienes busquen formalizar sus divisas.
“Si en sus bancos les piden cosas de más (léase, romper las p…), no pierdan su tiempo. Pueden ir al Banco Nación, donde su presidente dará la instrucción de cumplir estrictamente con la ley, esto es, que la persona solo tenga que mostrar que se ha adherido al régimen de ganancia simplificado”
El ministro enfatizó que en esa entidad, los ahorristas podrán depositar sus dólares y disponer de inmediato, ya sea para consumir o para ahorrar y ganar intereses, “como en cualquier lugar del mundo”.
Los dichos del ministro de Economía tuvieron eco en un ahora exladero: Juan Pazo, quien fuera titular de ARCA, trabajo en el proyecto para incentivar el uso de los dólares del colchón, y que dejó el cargo la semana pasada.
En declaraciones radiales, Pazo remarcó que los bancos no deben solicitarle a sus clientes ningún paso extra, solo la inscripción al Régimen Simplificado de Ganancias. Ese régimen tiene 20.000 contribuyentes adheridos previo a la sanción de la ley, dijo el exfuncionario.
“Los ciudadanos tienen que saber que no hay ninguna obligación de presentar más documentación que la inscripción al régimen simplificado de Ganancias”, dijo el extitular de ARCA.
En tanto, elBanco Nación salió a remarcar que con la sanción de la ley de Inocencia Fiscal “a través de sus más de 700 sucursales y canales digitales, está preparado para satisfacer la demanda de sus clientes y de toda aquella persona interesada a la hora de hacer consultas o solicitar nuestro servicio para disponer de sus ahorros”.
La Ley de Inocencia Fiscal crea el Régimen Simplificado de Ganancias, pensado para quienes tengan ingresos anuales menores a $1000 millones y un patrimonio inferior a $10.000 millones, siempre que no sean grandes contribuyentes.
Con el nuevo esquema, ARCA no controlará los gastos de un contribuyente o los bienes que posee. Solo tendrán en cuenta los ingresos facturados y los gastos deducibles para calcular el Impuesto a las Ganancias. Si el contribuyente paga en término lo que ARCA estipula, queda liberado de cualquier otro reclamo por Ganancias.
Además, quienes adhieran al régimen podrán comprar autos, casas o realizar grandes operaciones sin quedar bajo la lupa de ARCA. Tampoco los bancos, concesionarias, escribanías ni tarjetas de crédito estarán obligados a informar sobre esas transacciones.
Por otra parte, la Ley de Inocencia Fiscal introduce una reforma en el Régimen Penal Tributario. En primer lugar, actualiza los montos que determinan los delitos fiscales.
Por ejemplo, el piso para la evasión simple subirá de $1,5 millones a $100 millones, y para la evasión agravada de $15 millones a $1000 millones.
También se incorpora un mecanismo que permite extinguir la acción penal si el contribuyente cancela la deuda e intereses antes de que se formule la denuncia.
Si el proceso ya se inició, podrá cerrarlo con el pago total más un 50% adicional dentro de los 30 días. Esta posibilidad solo podrá usarse una vez por persona o empresa.
Además, se reducen los plazos que tiene el Estado para revisar y reclamar impuestos. Se propone un esquema de tres, cinco o diez años, según el nivel de cumplimiento del contribuyente.

