Vecinos de Villa Santa Rita pidieron a la Legislatura porteña el tratamiento “urgente” de un proyecto para expropiar un predio abandonado de la zona, para transformarlo en una plaza ya que es el único barrio en toda la Ciudad de Buenos Aires que no cuenta con un espacio verde. Eso refleja un déficit en materia ambiental que se agudizó con la pandemia.
La iniciativa fue girada a los diputados a través de una resolución que lleva las firmas de todos los integrantes de la Junta Comunal 11 para declarar “de utilidad pública y sujeto a expropiación” un terreno de unos 1640 metros cuadrados, que es uno de los pocos sin construcciones que quedan disponibles y el cual, según los datos aportados, no tiene propietario conocido.
“Considerando la falta de terrenos de titularidad del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en la zona, debemos recurrir a la declaración de utilidad pública de un lote privado, que a la fecha se encuentra en desuso y baldío”, remarcaron los comuneros, quienes, además, afirmaron que con la propuesta “se pretende dar una solución a una necesidad imperiosa de los vecinos del barrio”.
El predio está a mitad de la cuadra de la avenida Álvarez Jonte al 3200, tiene su ingreso tapiado con carteles publicitarios y una salida en el sector trasero que da a un pasaje, en una zona caracterizada por casas bajas, pocos edificios, dos escuelas y una gran cantidad de comercios barriales.
Los vecinos más antiguos en el barrio recuerdan que allí funcionó un complejo de canchas de tenis durante la década de los ’90 y, con posterioridad, en uno de los laterales del terreno, existió un lavadero de autos, que cerró en el 2010. Desde entonces el lugar quedó abandonado.
Villa Santa Rita está delimitada por Condarco, Álvarez Jonte, Miranda, Joaquín V. González y la avenida Gaona, tiene una superficie de 2,2 kilómetros cuadrados y una población que, de acuerdo a la administración porteña en base a datos censales del 2001, superaba ya por los 34 mil habitantes.
“Los vecinos de Villa Santa Rita tenemos cero metro cuadrado de espacio verde disponible por habitante siendo uno de los dos barrios más poblados de la Comuna 11”, indicaron a Télam y remarcaron que la OMS estima que cada persona debe contar con un mínimo de 10 y hasta 15 metros cuadrados de espacio verde para vivir en un entorno saludable.
Guillermina, una vecina, dijo a Télam que “es un reclamo histórico tener un espacio verde, aunque sea chico, porque con la pandemia se volvió algo vital Para los más chicos, pero sobre todo para los adultos mayores, a quienes les cuesta caminar muchas cuadras para llegar a alguna de las plazas que hay en barrios cercanos, como Villa del Parque”.
“Alguien nos tiene que escuchar, sabemos que es difícil comprar el terreno”, agregó y pidió a la Legislatura que inicie el tratamiento del proyecto que fue remitido por la Comuna en noviembre del año pasado y que aún no fue abordado por la Comisión de Ambiente que preside la diputada Mercedes de las Casas (Vamos Juntos) dado que, en lo que va del 2021, solo fue convocada una reunión.
Federico Arabia, también vecino desde hace una década, manifestó que “somos el único barrio que no tiene un espacio verde” y cuestionó a las autoridades porteñas por “poner como que tenemos una plaza en Jonte y Miranda y eso es una cargada porque es un espacio de dos por dos sin espacio absorbente y verde”.,
“Va a ser una plaza chica, pero algo siempre es mejor que nada”, evaluó Matías, un residente que fomenta la instalación de huertas barriales como alternativa ante el déficit de espacios verdes. En tanto que Elisa dijo que el reclamo barrial por la plaza “es una cuestión de derechos porque es un lugar de encuentro, es el corazón de un barrio”.
El grupo expresó además su intención que, de aprobarse la expropiación del predio, el gobierno de la Ciudad los convoque para diseñar el modelo de plaza. Anticiparon que les gustaría que cuente con “árboles que crezcan pronto, juegos para los chicos y muy poco cemento”.
El legislador Matías Barroetaveña (Frente de Todos) señaló a Télam que “los vecinos tienen razón” en su reclamo porque “necesitan de espacios verdes de calidad” y consideró que la idea para expropiar el predio “es una herramienta que existe y se utilizó en la Ciudad de Buenos Aires”.
No obstante, admitió que para lograr la sanción del proyecto se requiere de los votos del bloque oficialista de Vamos Juntos, lo que dificultaría la aprobación dado que “les cuesta avanzar en todo lo que representa un gasto de dinero”.
Según un informe oficial del gobierno de la Ciudad del 2019 sobre los niveles de cobertura vegetal muestra un déficit en el barrio Villa Santa Rita ya que el espacio verde total por superficie es de apenas un 25% frente al 76% del barrio mejor posicionado que es Puerto Madero.
Además, prueba que la superficie de espacio verde por habitante es de 16 por ciento frente al 678% de Puerto Madero; al tiempo que el índice de cobertura arbórea, es decir, los que más árboles tienen, apenas llega a 0,18, lo que representa un coeficiente cercano a cero.
“Estos indicadores sumados a la falta de espacio verde propio ponen al barrio en una clara situación de alarma en tanto salud pública y calidad de vida, discriminando claramente a sus habitantes frente a otros barrios de la ciudad que no solo tienen mejores indicadores sino que todos gozan de al menos un espacio verde propio”, advirtieron desde el grupo barrial.