La ministra de Salud, Carla Vizzotti, encabezó este lunes una reunión de la Mesa de Coordinación del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA), espacio en el que se debatió la marcha de las políticas implementadas para enfrentar la segunda ola de coronavirus y se puso especial atención en el manejo conjunto de camas de terapia intensiva entre las jurisdicciones.
El encuentro, que diversas fuentes calificaron de carácter “técnico”, tuvo como objeto “robustecer la respuesta integral del sistema de salud”, siguiendo políticas de coordinación similares a las que ya se usaron el año pasado.
La cartera sanitaria había indicado este domingo que son 3.789 los internados en unidades de terapia intensiva (UTI), con un porcentaje de ocupación que ronda el 66,7% en la AMBA, el espacio geográfico que conforman la Ciudad de Buenos Aires y el cordón de municipios que integran el conurbano bonaerense.
Por ello, entre otros puntos, se acordó estar en “contacto permanente con cada jurisdicción para potenciar la colaboración entre los distintos subsectores y priorizar la atención de la patología Covid”, señalaron algunos de los participantes.
Así, el foco se posó sobre “el sistema de derivaciones” de pacientes, un recurso que podría ser necesario ante la creciente ocupación de camas que se registra en los últimos días en el país, conforme al exponencial incremento de los contagios.
Desde la provincia de Buenos Aires, explicaron que el sistema de gestión que posee permite seguir toda la información de los sistemas “público y privado, municipal y provincial” y consideran que cuentan con todos los datos necesarios para administrar la situación y estar atentos a las necesidades que pudiera tener la Ciudad.
En ese sentido, una parte de la reunión sirvió para repasar esos números y los del distrito que gobierna Horacio Rodríguez Larreta, donde -oficialmente- siempre se han comunicado exclusivamente las camas disponibles del sistema público.
Las fuentes señalaron, además, que las “medidas de derivación de pacientes” ya se aplicaron en 2020 durante la primera ola del coronavirus y podrían tener que repetirse este año.
Tanto Vizzotti y los ministros de Salud de las jurisdicciones con presencia en el AMBA, Fernán Quirós y Daniel Gollan, como la titular del PAMI, Luana Volnovich, “coincidieron en la necesidad de reforzar el sistema de salud público para ampliar las camas de internación COVID”.
Ese punto de entendimiento llega luego de que los dirigentes hubieran manifestado públicamente sus divergencias: mientras la Provincia habló en las últimas horas de posibles profundizaciones a las medidas por el recrudecimiento de los contagios, la Ciudad se mostró cautelosa a la espera de los efectos de las restricciones adoptadas de la semana pasada.
Gollan, que días atrás se reunió con todos los prestadores privados de obras sociales, municipales y sindicales para evaluar cómo evoluciona la situación desde el sector de prestadores de salud, indicó hoy en diálogo con FM Radio con Vos que “es preocupante lo que pasa en los centros de salud y hay que trasmitirlo de forma clara para que la gente tome conciencia”.
“No sé si la gente que tiene medicina prepaga tiene noción de que sus efectores, tanto en la provincia como en la Ciudad de Buenos Aires, tal cual lo están expresando sus referentes, están ya al 95 o 100%” de ocupación de camas, comentó.
Señaló que hay un sector prestador privado de la provincia de Buenos Aires que son pequeñas clínicas “que aún no está apretado, tienen una ocupación del 61 por ciento en este momento y subiendo”.
Gollan indicó que el sector público de la provincia se encuentra hoy “en un nivel similar al pico del año pasado cuando más casos de internación tuvimos, casi llegando al 72%”, pero volvió a alertar que, “a la velocidad que venimos, se nos pueden terminar las camas”.
En tanto, previo a la reunión, este mediodía, de la Mesa de Coordinación del AMBA, el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, evitó adelantar la postura que la Ciudad llevaría a la reunión con las autoridades sanitarias, al considerar que los números que se ven ahora son “el impacto se Semana Santa y los días previos”,
Aseguró que en este punto de la segunda ola de coronavirus “los casos son altos y siguen en aumento”, pero evaluó que, tras este último fin de semana, debería observarse el efecto de las nuevas restricciones anunciadas por el Gobierno nacional.
“Yo miro el tablero todas las mañanas y todos los días. Ahora vos estás viendo el impacto de Semana Santa y de antes; todavía falta ver el impacto de las medidas de la semana pasada, con datos concretos y contundentes”, dijo Santilli, en diálogo con radio La Red.
Con todo, afirmó que “hay que estar monitoreando todos los días sector público y privado” para ver la ocupación de camas, y contó que ayuda mucho que “están liberando camas de otras patologías y desprogramando intervenciones programadas”, en los hospitales públicos.
Volnovich, por su parte, repitió en la reunión su preocupación por el aumento de internaciones, tal como lo hizo el fin de semana pasado, cuando señaló que no había “camas de terapia COVID para afiliados de PAMI en Ciudad” y que se estaba “cerca del 100% de ocupación de camas de terapia en AMBA”.
Además de los mencionados, estuvieron presentes el viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak; el superintendente de Servicios de Salud, Eugenio Zanarini; Sandra Tirado, Juan Manuel Castelli, Analía Rearte, Sonia Tarragona y Victor Urbani, todos funcionarios del ministerio de Salud nacional.
La reunión fue la antesala de la que, a las 18, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, encabezará en la Casa Rosada, de la que participarán científicos, médicos y expertos junto a Vizzotti y buena parte de los ministros del Gobierno nacional.
Según los datos oficiales difundidos el domingo, 132 personas murieron y 15.262 fueron reportadas con coronavirus en las últimas 24 horas en la Argentina, con lo que suman 57.779 los fallecidos registrados a nivel nacional y 2.532.562 los contagiados desde el inicio de la pandemia.